Hay diferentes circunstancias de la vida diaria que llevan a los cuerpos a dejar de absorber una de las vitaminas más importantes. Suele ocurrir que cuando se toman medicamentos para perder peso, como la Metformina (que se suele administrar en la diabetes), o antibióticos como el cloranfenicol, los protectores estomacales como el omeprazol, los antiácidos y tratamientos para las úlceras, suelen no sólo reducir los niveles de esta vitamina, sino que evitan su correcta absorción.
La vitamina B12 es fundamental para muchos procesos y del organismo, pero aunque en la dieta keto rara vez bajan esos niveles, los cambios en las dietas pudieran influir en la modificación de la correcta absorción de este micronutriente.
Estos son algunos síntomas a los que debes prestar atención. Si bien pueden ser síntomas de otras enfermedades, pídeles a tu médico que te haga un examen de B12 en sangre para revisar cómo están esos niveles.
1. ¿Sientes que tus manos, pies o piernas se duermen o te la sensación como si tuvieran “alfileres y agujas”? La escasez de B12 puede dañar la cubierta protectora que cubre los nervios. Las enfermedades como la celiaquía, la enfermedad de Crohn u otras enfermedades intestinales pueden dificultar que el cuerpo absorba la vitamina.
2. Los niveles bajos de B12, pueden indicar que no hay suficientes glóbulos rojos sanos para mover el oxígeno por todo el cuerpo (anemia). Eso puede darte escalofríos y frío especialmente en las manos y los pies.
3. La falta de vitamina B12 puede provocar depresión, confusión, problemas de memoria y demencia. También puede afectar el equilibrio y dar mareos. Sus músculos pueden perder fuerza. También puede sentir cansancio. Por lo tanto, es importante prestar atención a cualquier síntoma, que puede crecer lentamente o aparecer más rápidamente, y alertar a su médico.
4. Al envejecer es posible que el cuerpo no absorba B12 tan fácilmente. Si no se suplementa un nivel bajo de B12 podría provocar anemia, daño a los nervios, cambios de humor y otros problemas graves. Algo similar ocurre cuando la persona se ha sometido a una cirugía bariátrica.
La vitamina B12 está presente de forma abundante en la proteína animal, como la carne, pollo, huevos, órganos y lácteos.
